viernes, 17 de agosto de 2007

Experiencias en los Estados Unidos

En este periodo estival, caracterizado por el letargo que produce en algunos la ruptura de la rutina cotidiana, los viajes que emprenden los más afortunados y el consumo clasemediero exacerbado, tal vez sea conveniente pensar un poco en lo que implica el hecho de visitar aquellos sitios en los que no vivimos nuestra vida diaria. Como ejemplo, valga decir que -a raíz del forzado exilio que sufrió-, Adorno nos relata sus experiencias en los Estados Unidos, todo un ejercicio de síntesis y reflexión para los que son nómadas, viajeros o inmigrantes en el mundo actual. Cito lo que a mi parecer es lo más relevante:

“La gente se inclina a contemplar el concepto de adaptación, del “adjustment”, meramente como algo negativo, como extinción de la espontaneidad, de la autonomía de la persona individual. Pero es una ilusión, criticada con fuerza por Goethe y Hegel, que el proceso de humanización y de cultura se desarrolle necesariamente y siempre desde adentro hacia fuera… No nos hacemos libres a medida que nos realizamos a nosotros mismos como individuos, sino en la medida que salimos de nosotros mismos, vamos al encuentro de los demás y, en cierto sentido, nos entregamos a ellos. Solo de este modo nos definimos como individuos, no en cuanto nos regamos a nosotros mismos como a una plantita con el fin de hacernos personalidades omnilateralmente cultas.”

“Fue necesario que llegase yo a los Estados Unidos para poder experimentar de veras el peso de lo que significa la cultura… ahí, es decir, viajando a otro país que me resultaba tan nuevo como extraño, me libere de la credulidad cultural, adquirí la capacidad de ver la cultura desde fuera.”

1 comentario:

Franziska dijo...

Las circunstancias que rodean a la vida del hombre es lo que va produciendo el entorno cultural y, por supuesto, la influencia que los hombres o mujeres que lideran las comunidades van imponiendo. Cuando se logra penetrar en la vida de los pueblos, es decir, en su cultura, cuando se conocen los por qués, dejan de chocar las costumbres de los otros. En español tenemos un refrán que dice:
"Por donde fueres, haz lo que vieres".
Ya sé que esto es muy discutible y que puede echarse abajo fácilmente. Si nos parece atroz lo que hacen es claro que no les imitaremos pero es necesario que sepamos por qué actúan de ese modo. Y después, juzgaremos.